Corcho


Cuando las palabras bailan

y bailando pierden altura,

planeando amerizan,

y en el mar se estrellan,

 

De esas gotas de espuma,

justo antes del silencio,

nacen los sueños humanos.

 

Quisiera aprender a ser,

tan sólo, un corcho náufrago

que, indolente, flota sobre ellos.

 

Nekovidal 2008 – nekovidal@arteslibres.net