Dios errante

                                     

                                                                            

 

Crear todo de nada sin dar alivio al olvido,
repetir una y otra vez idéntico esquema,
recrearse tanto en el infinito vacío
como en lo eterno, por sistema.

Tristes dioses necesarios,
de su triste sino cautivos,
¿a qué este empeño en mostrarnos,
a diario, tan mísero y caduco destino?

¿a qué dar conciencia de muerte
a un angustiado ser vivo?
¿a qué esta implacable locura,
este obscuro desatino?

Tristes dioses necesarios,
impregnados de miedo raído,
¿por qué este empeño milenario
en recrear y volver a repetir
aquello eternamente repetido?

Pobre dios errante que necesita,
atisbar en nuestra desgracia su ser,
y para consuelo de su eterna condena,
da vida, la quita, modela el tiempo,
macabro juego, su ser es no dejar ser.

Disculpa si me niego a idolatrarte,
pero me basto para vaciar mi vacío
y como tú de tu infinito me siento,
de mis límites, cautivo.