Ni mu


Nosotros, los eternos vagabundos del verbo,

los parias malditos pero reverenciados del arte,

los apostatas del miedo, los suicidas cotidianos,

los mortales hechizados por el juego de las letras.

 

Nosotros, amos y esclavos de las palabras,

nunca podremos conmover con una cálida melodía,

ni impresionar con una colorida imagen luminosa,

ni formular la perfecta fórmula que explique el Todo.

 

Nosotros describiremos con detalle un paisaje,

pero no podremos hacer aparecer su luz;

escribiremos la letra de una bella canción,

pero no podremos expresar la belleza de su música.

 

Pero nosotros y sólo nosotros, podremos un buen día

escribir ese poema perfecto por absurdo, que posea en si

la cálida luz del cuadro, la dulce melodía, y el Todo,

ese poema que conmueva hasta el llanto al cuerdo,

divierta al niño o deje seriamente pensativo al loco.

 

Podemos, en cualquier momento, escribir ese mágico poema,

o tomarnos todo demasiado en serio, olvidarnos de jugar . . .

y no decir ni mu …

 

Nekovidal 2008 – nekovidal@arteslibres.net